En sus inicios, las sillas de ruedas eran construidas principalmente con madera y metal. Los modelos más antiguos solían tener estructuras de madera pesada y ruedas de madera o metal, lo que resultaba en dispositivos bastante voluminosos y pesados. Estos materiales eran los más comunes y accesibles en ese momento, pero limitaban la movilidad y la comodidad de los usuarios.
A medida que avanzaba el siglo XIX, se comenzaron a utilizar materiales más ligeros y duraderos en la fabricación de sillas de ruedas. El uso de metal, como el acero, permitió reducir el peso de las sillas y mejorar su resistencia. Además, el desarrollo de ruedas de radios y neumáticos de goma contribuyó a un desplazamiento más suave y cómodo.
La introducción de la silla de ruedas plegable por George Jennings en 1869 también influyó en la evolución de los materiales. La posibilidad de plegar la silla requería mecanismos de bisagras y uniones más avanzados, lo que llevó a la incorporación de materiales como el aluminio y el acero inoxidable para lograr un equilibrio entre resistencia y portabilidad.
La llegada del siglo XX trajo consigo avances tecnológicos y una mayor diversificación en los materiales utilizados en las sillas de ruedas. Durante las guerras mundiales, la necesidad de sillas de ruedas más livianas y resistentes para uso militar impulsó la investigación y el desarrollo en nuevos materiales. El aluminio, por ejemplo, se convirtió en un material ampliamente utilizado debido a su ligereza y durabilidad.
En la década de 1930, se introdujeron las primeras sillas de ruedas eléctricas, lo que generó un aumento en la incorporación de componentes electrónicos y baterías en el diseño de las sillas.
Hoy en día, las sillas de ruedas están construidas con una variedad de materiales avanzados, que incluyen aleaciones de aluminio, titanio y plásticos de ingeniería. Estos materiales permiten la fabricación de sillas de ruedas más ligeras, resistentes y personalizadas para satisfacer las necesidades individuales de los usuarios. Además, la tecnología sigue desempeñando un papel clave en el diseño de sillas de ruedas modernas, con características como sistemas de propulsión eléctrica más sofisticados, sistemas de suspensión y ajustes ergonómicos para aumentar la comodidad y la funcionalidad.
En resumen, a lo largo de su evolución, las sillas de ruedas han pasado de estar construidas principalmente con madera y metal a incorporar una variedad de materiales avanzados, lo que ha mejorado su rendimiento, comodidad y accesibilidad para las personas con movilidad reducida.
Una de las características distintivas de las sillas de ruedas de ‘Supplies Medical’ es su atención meticulosa a la personalización. Comprendiendo que cada individuo tiene necesidades únicas, la marca ofrece una amplia gama de modelos y opciones, desde sillas manuales altamente ajustables hasta sillas eléctricas de vanguardia con controles intuitivos. Los sistemas de suspensión avanzados y los asientos anatómicos se combinan para ofrecer un soporte excepcional y una experiencia de conducción suave incluso en terrenos irregulares. La dedicación de ‘Supplies Medical’ a la calidad y la innovación ha llevado a sus sillas de ruedas a encabezar las listas de ventas en Argentina. No es sorprendente que los usuarios confíen en la marca para satisfacer sus necesidades de movilidad, ya que cada silla es el resultado de un proceso de diseño minucioso respaldado por investigaciones en curso y avances tecnológicos.